martes, 28 de septiembre de 2010

Llegué!

Uno no sabe muy bien cómo empezar con el Barcelovia, por eso la primera entrada del blog merecía tiempo y poner las ideas (las pocas o las muchas que haya) de la mejor manera posible.

Ya estoy en Barcelona, viviendo en Reina Amalia (la entrada sur del Raval) y de momento la cosa fluye. Digo que fluye porque mis clases no empiezan hasta el viernes y hasta entonces tengo toooooodo el tiempo del mundo (os podeis animar a venir, que ratos me sobran).

Pero empezaremos por el principio, vivo con dos compis, uno mayor (32) y otro más jovencete (20) a los que como os podeis imaginar empezaré a liar en breves. El piso está muy bien, muy luminoso y con un salón muy grande que da a la calle. Esto sería bonito (que no digo que no lo sea del todo) si no estuviera en el Raval. Me explico. Da igual la hora que sea, da igual el frio que haga, que siempre habrá gente gritando, coches pasando, camiones descargando o indios discutiendo. El Raval es un pequeño mundo de contrastes, es como viajar a Oriente Medio sin coger ningún vuelo. Pero es lo que tiene la globalización, ¿No? Además le da alegría a la calle.

Ya he ido a mi Universidad en metro, haciéndome el recorrido para ir calculando y está a un tiro de piedra. En breves empezaré las prácticas (espero) y las clases de catalán. Puede que me ponga de una **** vez a sacarme el first, pero eso ya lo iremos viendo.

Y no mucho más por aquí. Creo que volveré a intentar otra expedición al Raval profundo (juro que da más miedete de lo que pueda parecer).

Besetessss!!!